Manolita Susagna
Manolita Susagna

Manolita Susagna (Almenar, 1916 – Perpignan, 2010)

Nace en Almenar, un pequeño pueblo de la provincia de Lleida. Sus padres se instalan en Barcelona en el barrio de Gracia donde su padre dirige una empresa de transportes. Allí estudia costura y peluquería. En 1935 contrae matrimonio con su primo Francisco Susagna. Ese mismo año nace su primer hijo, Gilbert. La familia vive en Almenar donde Francisco trabaja en el Ayuntamiento y ella abre el primer salón de peluquería de señoras del pueblo.

Al estallar la guerra civil, su marido marcha al frente. Participa en la batalla de Madrid y en la batalla del Ebro. En 1938 los nacionales entran en Almenar. El salón de peluquería de Manolita es devastado. Ella debe abandonarlo y, junto con otras mujeres, empieza a trabajar en una fábrica de hilados en Alfarrás. Meses más tarde reabre su peluquería.

En febrero de 1939, Francisco participa en la Retirada pasando la frontera por Prats de Mollo. Es trasladado al campo del Barcarés como refugiado político. Posteriormente, marcha a trabajar al departamento del Aveyron y a la región de la Gironde como bracero.

Un año después, en marzo de 1940, con la intención de reencontrarse con Francisco en Francia, Manolita y su hijo Gilbert se dirigen a Figueras. Desde allí, cruzan la frontera clandestinamente acompañados por un guía contratado por el padre de Manolita. Pasan a pie por el Coll del Ouillat hasta Saint-Genis des Fontaines. Los gendarmes franceses le requisan su dinero y sus joyas que nunca le son devueltos. Son llevados a Perpiñán y, desde allí, trasladados al campo de concentración de Bram, en el departamento de Aude, donde ella trabaja como enfermera. Francisco se reúne allí con su familia para sacarlos del campo y llevarlos con él a la Gironde .En ese momento se produce la ocupación alemana de la región de Gironde lo que invalida sus papeles de residencia y le impedirá regresar a su trabajo de bracero. Permanecen en el campo de Bram hasta su cierre en diciembre de 1940.

En esta fecha, los tres son trasladados al campo de concentración de Argelès donde hombres y mujeres permanecen separados. Manolita comienza a trabajar en el costurero que los cuáqueros tienen organizado en el campo y del que, posteriormente, será su directora. Durante este tiempo goza de una situación privilegiada al coser y peinar a la esposa del director del campo. Esto le permite obtener alimentos para su marido muy debilitado y un salvoconducto que le permite salir los domingos y ver a Francisco que permanece fuera del campo en las compañías de trabajo.
Gilbert y Manolita son trasladados al campo de concentración de Rivesaltes en agosto de 1941. Posteriormente son acogidos por el Socorro Menonita (cuáqueros) en su Casa de Convalecencia (Villa ST.Christophe) en la playa de Canet.
La familia se reúne, por fin, en noviembre de 1941 cuando Francisco tiene la posibilidad de reclamar la reagrupación familiar al disponer de trabajo (como obrero en un molino) y casa en Gers. Nuevamente se separan debido a que Francisco es trasladado por los alemanes a la región Atlántica para trabajar en el llamado “Muro del Atlántico” (fortificaciones realizadas por los alemanes para evitar un posible desembarco en la zona). Ella continúa en Gers hasta la vuelta de Francisco.

En 1946, tan solo cinco años después de la Retirada, se instalan en Perpiñán con la esperanza de regresar a España. Ella continúa cosiendo. En noviembre de 1946 nace su segundo hijo. La familia se instala definitivamente en Perpiñán.

Durante los años 50, las actividades del PCE-PSUC, aunque clandestinas, son numerosas. Trabajan siempre manteniendo relación con organizaciones francesas oficiales (CGT, PC, Unión de Mujeres, etc.). En estos años la policía francesa vigila muy estrechamente a los militantes españoles y continuamente tienen lugar redadas domiciliarias, arrestos, deportaciones a países del Este, etc., por lo que la prudencia es imprescindible. Desde su salida de los campos, Manolita participa en estas actividades y realiza labores de apoyo a los presos políticos españoles. Con otras mujeres, confecciona ropa y recoge ayudas para enviar a España.

En la década de los 70, se hace socia del Centro Español de Perpiñán donde abre una sección de costura de la que es profesora hasta un mes antes de su muerte, en marzo de 2010.

Fuentes:

  • Entrevista a Manolita Susagna por Mercedes Almagro, 2006.
  • Aportaciones y aclaraciones de Gilbert Susagna recogidas por Mercedes Delgado, noviembre 2010.